Pulpería “El pimentón” = Mariano Santamaría, un inmigrante aragonés
Por Juan Lucio Escandón
Mariano Santamaría llegó el 23 de Diciembre del año 1912 a bordo del vapor de bandera francesa “La Champagne” habiendo embarcado en el puerto de Burdeos, tenía en ese entonces 20 años. ERA MI PADRE.
Nacido en el pueblo de Agüero (“Casa de Laín”) en la Provincia de Huesca (España) era hijo de Susana Alastuey nativa de Santa Eulalia de Gállego y de Manuel, tenia dos hermanos: Felisa y Pedro José.- Mi padre desempeñaba la tarea de pastor de la hacienda propia.
Recuerdo que me solía contar sobre su travesía a bordo del vapor, y una de las cosas que no olvido es, que como no existían las cámaras frigoríficas en esa época en los barcos, llevaban la hacienda en pie y la faenaban a medida que necesitaban la carne para consumo, me decía que tenían un pequeño matadero muy bien organizado y el no se perdía de ver los momentos de la carneada.-
Cómo tantos otros inmigrantes llegó a instancias de su madre para que pudiera escapar de la crisis que azotaba a su país en ese entonces.
No estuvo alojado en el hotel de los inmigrantes en Buenos Aires por que conocía en Mar del Plata a otro aragonés de su mismo pueblo llamado Juan José Gastón que vivía en la calle Primero de Mayo 1472 donde se alojó temporalmente hasta conseguir su primer trabajo: limpiar las cunetas de las calles del barrio Stella Maris que ya habían comenzando a poblar los turistas, me contaba que los llevaban por la mañana desde la estación de trenes en un carro y los regresaban a la entrada del sol.
Posteriormente consiguió trabajo en la zona de Mechongué a 90 km. de Mar del Plata, en un paraje llamado “Las Piedritas”, talando montes de “curro” durante el día y finalizada la tarea, caminaba 10 kilómetros hasta una escuela rural para que el maestro le enseñara a leer y escribir para poder comunicarse con su familia de España sin depender de alguien que le hiciera y también leyera las cartas que recibía de su madre, que tampoco leía ni escribía y lo hacía ayudada por una sobrina. La casa de mi padre era lindera con la iglesia del pueblo y él solía oficiar de monaguillo por lo que tampoco el párroco se ocupaba de que por lo menos aprendieran a leer y escribir solo era importante que fueran buenos pastores.
Luego de algunos años de trabajo duro logró reunir algún dinero para arrendar unas hectáreas de campo y sembrar papa por su cuenta con resultados diversos, ya que me comentaba que cosechas enteras se perdían en grandes pilas sin lograr venderlas. Me decía que en aquellos años de soltería había comprado un fonógrafo marca “Edelweiss Concert Exposición” y muchos discos de pasta, por lo que era el invitado principal en todas las fiestas de la zona, allá iba Mariano en su sulky tirado por “El Lista” llevando el fonógrafo y sus discos para amenizar el baile de la fiesta, hoy lo conservo en mi poder y aún en funcionamiento.
En el año 1915 conoció a Silveria Justina Caldararo hija de los pulperos Blas Caldararo nacido en Fardela el 06/03/1863, fallecido el 05/08/1924 y María Rosa Bianco nacida en Episcopía el 05/03/1865 y fallecida el 23/04/1914 inmigrantes Italianos de la provincia de Potenza, dueños de la pulpería “El Deseo” ubicada en Cobo Partido de General Pueyrredón.-
Los “pulperos” Blas y María Rosa luego de fallecidos cesaron en su actividad y a partir del año 1932 Mariano y Silveria abrieron la pulpería “El Progreso” que se lo conoció como “El Pimentón” y que se mantuvo en actividad hasta el año 1932, hay mucho más para contar que lo relatado pero esa será otra valija con historia.
(*) Relato enviado por Roberto Santamaría para participar del concurso Valijas con Historia II, organizado por la Dirección General para la Promoción y Protección de los Derechos Humanos de General Pueryredon.
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