Silvia Bellantuono, una de las profesoras no videntes del Programa Educativo, explicó sobre

 

qué trata esta actividad: “En este momento tenemos dos grupos, ya que algunos alumnos hace 

 

mucho tiempo que se acercan al taller. Trabajamos con un programa ya definido desde 

 

principio de año, con lecturas funcionales y ejercicios de comunicación pero siempre cuidando 

 

la gramática y repasando los tiempos verbales”. Y especificó dónde se la puede ubicar hasta 

 

principios de abril: “Durante el verano estamos brindando nuestras clases en la Biblioteca 

 

Parlante para Ciegos (Alte. Brown y 14 de Julio - Plaza Peralta Ramos) los viernes de 9 a 13 y en 

 

la Biblioteca “Leopoldo Lugones” (Ayolas 3813 - Barrio Villa Lourdes – Puerto) los lunes de 9:30 

 

a 11:30. Ya en abril veremos en qué horarios nos acercaremos a Faro Norte y a Batán, donde 

 

también se pueden acercar los interesados en aprender italiano”.

 

También habló sobre las salidas didácticas que acostumbra este taller y lo que se está 

 

pensando para este año: “El año pasado visitamos la fábrica de dulces Guatan (Neuquen 1160) 

 

y nos visitó la escritora marplatense Silvia Cecchi para hablar sobre su libro “Tres baúles” y la 

 

inmigración en épocas de guerra. Para 2015 tengo una idea bastante loca, que me surgió luego 

 

de enterarme que las lanchas amarillas del puerto van desapareciendo poco a poco. Sería 

 

genial hacer una salida, aunque sea corta, con alguien que nos pueda contar la historia de la 

 

pesca. También está la posibilidad de visitar la empresa Pennisi”.

 

Por su parte, una de las profesoras más longevas en cuanto a participación ya que lleva 10 

 

años coordinando el taller de italiano, habló sobre el desarrollo que tuvo el Programa 

 

Educativo Barrial a lo largo de los años: “El PEBa ha ido evolucionando muchos en estos años, 

 

agregando muchas cosas útiles para los barrios. Orquestas infanto juveniles que sacan a los 

 

chicos de la calle, cursos de cerámica, jardinería, peluquería, cocina que abren fuentes de 

 

ocupación. Una persona que está ocupada no piensa en hacer estallidos”.

 

A su vez, también repasó su propia evolución y analizó su presente: “En general trabajo muy 

 

cómoda. Yo soy una persona que me gusta crear y acá me dan la libertad de enseñar, 

 

siguiendo un programa, pero utilizando mis propios métodos. Los ejercicios de comunicación y 

 

las salidas didácticas son formas de aprendizaje muy efectivas y por eso tengo que agradecer la 

 

libertad de trabajo que me dan”.